- En las Cortes de Castilla y León, los procuradores de Unión del Pueblo Leonés (UPL), José Ramón García Fernández y Alicia Gallego González, han presentado sendas preguntas dirigidas a la Junta, poniendo de manifiesto las deficiencias en la atención sanitaria de la provincia de Zamora.
Centros de salud sin médicos en horario ampliado
El pasado 16 de julio, según señala José Ramón García, se abrieron por las tardes varios centros de salud de Zamora sin la presencia de médicos de atención primaria. Estas instalaciones únicamente contaron con personal administrativo y de enfermería, mientras que los pacientes que necesitaron atención médica fueron derivados al centro de salud de Santa Elena, que opera 24 horas.
Ante esta situación, García ha exigido explicaciones a la Junta con tres preguntas clave:
- ¿Por qué se abrieron los centros sin contar con médicos?
- ¿Hubo una falta de previsión por parte de la Junta?
- ¿Es este un problema exclusivo de Zamora o ocurrió también en otras capitales de la comunidad?
La denuncia por vacantes en las plazas de médico de familia
Por su parte, Alicia Gallego ha recordado la denuncia realizada en mayo por la Plataforma por la Sanidad Pública de Zamora, en la que se destacaba que la provincia cuenta con 73 plazas vacantes de médico de familia. Esta cifra contrasta con la situación de otras provincias de Castilla y León, donde la cobertura de estas plazas supera la plantilla orgánica necesaria.
Gallego ha exigido a la Junta que valore esta problemática y que informe sobre sus planes para reducir el número de vacantes en Zamora.
Zamora, un epicentro de la crisis sanitaria
Ambas iniciativas reflejan la creciente preocupación por la precariedad sanitaria en Zamora, una provincia que, según sus representantes, enfrenta un trato desigual en comparación con otras áreas de la comunidad.
Estas preguntas no solo buscan respuestas, sino también medidas concretas que garanticen una atención sanitaria adecuada para todos los ciudadanos, especialmente en una región que ya sufre las consecuencias del envejecimiento poblacional y la despoblación.
La Junta tiene ahora la oportunidad de responder a estas inquietudes y demostrar si está preparada para abordar la crisis sanitaria que golpea a Zamora.