- Ayer por la tarde, los más pequeños de Tábara vivieron una experiencia inolvidable en la Casa de los Elfos. Reunidos con ilusión, escucharon con atención el relato del cuento del Cascanueces, narrado con todo el cariño por Carmen. Cada palabra, cada detalle, transportó a los niños a un mundo de magia y fantasía.
Al finalizar el cuento, los pequeños se adentraron en la casa, guiados por Carmen, donde el ejército de ratones, el Rey Ratón, el Hada de la Nieve, el Príncipe y demás figuras del relato cobraron vida. Estos personajes, que habían sido presentados en la narración, les esperaban para que los niños pudieran verlos en acción, recreando escenas que quedaron grabadas en sus corazones.
Para hacer de este día algo aún más especial, Carmen obsequió a cada niño con un cascanueces, un recuerdo para colgar en el árbol de Navidad. Con una sonrisa cómplice, les pidió que cada mañana al levantarse lo miraran fijamente a los ojos, porque este les guiñaría un ojo de contento al verlos.
La sorpresa no fue solo para los niños. Al final de la actividad, Carmen recibió un emotivo regalo de los pequeños a los que da catequesis, un gesto lleno de agradecimiento por los momentos inolvidables que comparten con ella.
Las Navidades con Ilusión en Tábara siguen regalando momentos mágicos para grandes y pequeños, demostrando que el espíritu de estas fiestas vive en cada rincón y en cada corazón.