Eugenio Rosado Garrido, 28 feb 2014.
16 – Escudos y Blasones de los Linajes y Escudo de Tábara III
BLASON LINAJES: PIMENTEL – ENRIQUEZ
Derecha Balcón Principal Palacio: LINAJE PIMENTELES (Izq.) y LINAJE ENRIQUEZ
(Dcha.)
PADRE DE D. BERNARDINO: Pedro Pimentel Vigil de Quiñones (V Sr. de Tábara)
MADRE DE D.BERNARDINO: Inés Enríquez de Guzmán (Casa de Alba de Liste y de Medina Sidonia)
SE OBSERVAN EN ESTE BLASON INCOMPLETO:
León León
Castillo 3 Barras 5 Veneras Castillo Castillo Castillo
León León
5 Veneras 3 Barras León
Castillo Castillo
León León
Castillo
Por los Padres de D. Bernardino: Pedro Pimentel Vigil de Quiñones (V Señor de Tábara) e Inés Enríquez de Guzmán (Hija del I Conde de Alba de Liste).
Diego de Almanza y su esposa María de Zúñiga, el 18-1-1465, fundan Mayorazgo sobre Almanza, Alcañices y Tábara, pertenecientes al Linaje Almanza para su hija Francisca, que caso con Pedro Pimentel (V Sr. Tábara); el cual, después de pleitos, solo recibe Tábara.
El padre y la madre de D. Bernardino, el 9-8-1497, Fundan un Primer Mayorazgo sobre Bienes del Mayorazgo del Linaje Pimentel y Tábara. D. Bernardino y su esposa (Constanza Osorio Bazán), el 2-6-1542, Fundan un Segundo Mayorazgo sobre el Estado de Tábara y Otras.
Enrique Enríquez de Quiñones y su esposa María de Luna, Fundan Mayorazgo, el 10-4-1504, sobre Villada y Otras, que pertenecían al Linaje Enríquez, y que recibirá Leonor Enríquez de Toledo, esposa del II Marqués de Tábara (Pedro Pimentel Osorio).
Escudo Deteriorado: Escudo partido, en la diestra Escudo Linaje Pimentel: Cuartelado, 1º y 4º en campo de oro tres franjas de gules, 2º y 3º en campo de sinople cinco veneras de plata puestas en soutier; en la siniestra Escudo Linaje Enríquez: Mantelado en curva, 1º y 2º en campo de gules castillos de oro aclarados de azur, el mantel de plata con león rampante de gules; con bordura componada de castillos de oro sobre gules y leones de gules sobre plata. Todo ello bordeado con corona de hojas.
Castillos alternando con leones proceden de la Casa Real de Trastamara.
EUGENIO ROSAD GARRIDO, Noviembre 2013