SAF – 18 de septiembre de 2017.
Un año más la directiva de la Cofradía del Carmen ha vuelto a sorprender en la organización de la fiesta más entrañable para los tabareses. En la cofradía del Carmen está todo el pueblo presente y en la festividad, en esta localidad se celebra el penúltimo domingo de Septiembre, no falta un solo tabarés a honrar a su Virgen del Carmen.
Alfredo y su grupo, como ya es tradicional, amenizó el recorrido hacia la casa del Mayordomo, este año D Juan Ballesteros y esposa Dª. María José Fariñas. El Grupo de Paloteo de los más pequeños, comenzó su actuación delante de la casa de los Mayordomos, como es de rigor y luego durante la procesión, en varias ocasiones, demostraron su buen hacer danzando varios palos.
En la iglesia no cabía un alfiler, llena a rebosar y la Santa Misa concelebrada junto a D. Carlos, por el sacerdote más joven de la Diócesis, D. Luis Fernández compañero de D. Carlos que cantó Misa el pasado mes de julio y D. Avelino, sacerdote, hijo del pueblo. El Coro de Coreses, una vez más amenizó la Liturgia con una “Misa Castellana” que dio a la ceremonia ese aire especial de nuestra tierra.
Tras la Santa Misa, la procesión recorrió las calles de la Villa por el recorrido de costumbre, y al final tras la subasta de los brazos para introducir a la Virgen de nuevo a su trono, la pelea por conseguir un ramo de los que lucía la Virgen en sus andas y ya una vez en el interior de la iglesia, se dio por concluida la ceremonia religiosa, a eso de las tres de la tarde.
La comida de hermandad, este año por su nutrido número de cofrades, 130, hubo de hacerse en El Cubo, donde el Restaurante El Roble, se encargó de servir con abundancia y satisfacer a los estómagos vacíos. Tras la comida, tuvo lugar el refresco para todos los vecinos a cargo del Mayordomo.
La guinda la puso el tren. La cofradía este año ha tenido la feliz idea de traer un tren para que los mayores pudieran trasladarse al Cubo sin esfuerzo, aunque los que más disfrutaron del invento fueron los más jóvenes que recorrieron el pueblo varias veces subidos en la atracción más importante del día. Los más pequeños también tuvieron su momento, gigantes hinchables fueron la atracción de los más menudos durante la comida y el refresco para que permitieran a los padres una comida tranquila …
Fotos: SAF |