El auditorio Leticia Resino de Tábara, fue en esta ocasión el escenario idóneo, para conmemorar a través de los premios que llevan su nombre, al poeta Tabares León Felipe.

Paquita Gutiérrez, concejala de Cultura del ayuntamiento de Tábara, fue la encargada de conducir los diferentes actos, que se habían programado para este acontecimiento tan representativo de nuestro pueblo, que después de 20 ediciones, sigue concentrando el interés de poetas de todo el mundo, que desean que su nombre, quede ligado en su obra al de nuestro poeta universal.

Cedió la palabra a Antonio Juárez, alcalde de Tábara, que fue el encargado de dar por inaugurado este acto y se mostró optimista, a pesar de la situación que estamos atravesando, porque es algo que le debemos a todos aquellos por los que estamos trabajando y certámenes literarios y culturales como el que estábamos celebrando, representan una de las mejores formas de luchar contra la despoblación que estamos sufriendo.
Después de declarar inaugurado el evento por el alcalde Tabarés, Paquita Gutiérrez agradeció la implicación de Jesús Losada, un poeta zamorano doctor en literatura contemporánea hispano portuguesa, la editorial Celya, Fernando de la Cruz, que es el escultor que ha diseñado el premio que se entrega a los ganadores de cada edición de este certamen y a Caja Rural de Zamora, sin los cuales este premio no tendría la repercusión que en estos momentos ha adquirido y que sitúa a Tábara en el mundo de la cultura y cuyo principal logro, está representado por este premio internacional.
Con unas palabras del poeta, la conductora del acto cedió la palabra a Jesús Losada:
Poetas nunca cantemos
la vida del mismo pueblo,
ni la flor de un solo huerto.
Que sean todos los pueblos
y todos los huertos nuestros
El poeta zamorano, celebró este nuevo encuentro después de 20 ediciones en la cuna de León Felipe, lamentando que por la situación de pandemia que estamos padeciendo, se hayan tenido que acortar algunas actividades, pero el acto a pesar de las restricciones, se ha mantenido fiel a la memoria del poeta, que representa uno de los valores más importantes que Zamora ha aportado a la literatura universal.

Jesús Losada presentó a Agustín de Andrés, un poeta zamorano, autor de varios libros de poemas, que actualmente ejerce la docencia en Cataluña y ha sido en esta edición, el encargado de ofrecer una ponencia sobre la semblanza del poeta Tabarés.
Parafraseando a León Felipe, ha idohaciendo una semblanza del valor del testimonio que el poeta nos legó y recordando algunos de sus versos intercalados con su visión de lo que el poeta quiso expresar, nos fue haciendo una entretenida disertación, sobre lo que el escritor del odio y del amor cantaba sin apenas atenuar la voz y que supo como muy pocos, poner música a la palabra y a través de sus versos de caminante y de peregrino, conseguiríamos encontrar el sendero de su poesía.
Qué lástima, que un poeta errante como León Felipe, tuviera una vida como ese Quijote que ensalzó en algunos de sus versos o como esa piedra pequeña, que rodaba en los caminos de ese Romero que con la palabra viajó por la vida y nos legó lo más profundo de su pensamiento.

Sin duda, Agustín de Andrés, profundizó en el alma del poeta, porque nadie mejor que un poeta, para entender lo que trata de decirnos otro poeta y en este caso, el poeta es quien sabe comprenderlo como nadie, al contrario que aquellos versos de León Felipe que aseguraban que, para enterrar a los muertos, cualquiera menos un sepulturero.
Tras la disertación de Agustín de Andrés, hubo un breve turno de preguntas, en la que se echó en falta, que Tábara contará con una casa dedicada a la memoria de León Felipe, podría ser ese escaparate perfecto para que este pueblo fuera más visitado y vinculado con nuestro poeta

Joan Gamper, responsable de editorial Celya, fue el encargado de dar lectura al fallo que el jurado había tenido en esta XX edición.
Recordó que son 20 años en torno a la figura de León Felipe, dos lustros intensos y extensos, en los que se han presentado miles de trabajos que han optado a ligar su nombre con el de nuestro poeta y durante estos 20 años, tuvo el recuerdo para algunos de los ganadores de ediciones anteriores. También se han realizado actividades, cursos y gestiones diversas, que se han hecho para mantener vigente la memoria del pueblo y de su poeta.
Explicó el sistema por el que se determinan los premios, en los cuales el presidente del jurado es siempre el alcalde de Tábara y la implicación de Caja Rural de Zamora, resultaban importantes para que cada edición fuera superando a la anterior.
El plazo del concurso comienza el día del libro (23 de abril) y finaliza el 24 de julio y es un concurso abierto en el que se cuenta con una elevada participación. En esta edición se han presentado 392 trabajos de todo el mundo y después de una primera criba, se seleccionan 20 finalistas y en este segundo descarte, quedan seis trabajos que son entregados al jurado, que está compuesto por ganadores de ediciones anteriores, por el alcalde de Tábara Antonio Juárez y la concejal de cultura Paquita Gutiérrez.
En esta edición el premio del jurado ha sido por unanimidad porque todos los que formaban el jurado, han estado de acuerdo, que el trabajo presentado, era el que debía hacerse merecedor del mismo.

En presencia de los asistentes, Paquita Gutiérrez abrió el sobre con las plicas que se establecían para este premio y el ganador fue la obra que lleva el título, cansancio de materia escrita por Julen A. Carreño Aguado, alicantino de nacimiento y licenciado en derecho y humanidades, que actualmente ejerce como profesor en Sevilla. Por su currículum cuenta con varios premios en certámenes similares y a juicio del jurado, esta obra se trata de un poemario que no tiene una fácil lectura ni es de rápida digestión, pero además de arduo es un poemario trabajado, profundo e intenso. Unos poemas cuidados, cultos y afinados donde nada sobra, donde cada metáfora ocupa su justo lugar. El autor va desarrollando una poesía en continua dialéctica sobre el paso del tiempo, sobre la fatiga de los materiales que nos conforman y constituyen”cansancio de materia”, que así se denomina en física y a fin de cuentas, sobre lo que somos, sobre las preguntas esenciales que nos nombran. El ritmo y la medida de los textos se ajustan perfectamente al meditativo, filosófico y, en algunos momentos, irónico. Y no por ser un libro reflexivo deja de tener el calor de la buena poesía, el toque de un lenguaje original, contenido. Un libro, en resumen, merecedor de nuestra atención para verlo con tranquilidad, para admirarnos de la maestría el autor y para hacer nuestros los poemas.
Seguidamente intervino José Luis Morales, de Ciudad Real, que fue el ganador de la edición anterior y se presentó el libro que recoge los poemas que presentó al concurso. El poeta ha ganado varios premios vinculados con certámenes dedicados a poetas consagrados y aseguró la satisfacción de vincular su nombre al del poeta Tabarés, porque cuando contaba con tan sólo 14 años, en una clase de literatura su profesor leyó una serie de poemas de varios autores, pero siempre recuerda que la poesía de León Felipe la entendió al momento y la sintió como suya y se crio y creció como poeta, gracias a la influencia que tuvo el poeta Tabarés, por eso, asociar su nombre con el de León Felipe, representaba algo muy importante para él.
Leyó algunos de los poetas que conforma su libro en el que se percibió la vinculación de su obra con los problemas sociales que padecemos cada día y algunos textos, parecían noticias extraídas de un periódico actual, al que el autor únicamente se limitaba a ponerle el ritmo y la musicalidad que diera sentido al poema.
Seguidamente se ofreció un concierto en el que la argentina María Cortés, presentó algunos de los trabajos que había creado intercalándolos con las palabras del poeta Tabarés. Se encontraba acompañada al contrabajo por Lila Horovitz, a los vientos y la percusión por Pablo Jiménez y a la guitarra por Sergio Fulqueris que amenizaron este acto, interpretando música de autor engolada con esa poesía que presidía todo el acto.
Felicitar por este evento que mantiene viva la memoria del poeta al ayuntamiento de Tábara, así como los ganadores de la pasada y de la presente edición y a todos los que intervienen, para que este certamen, siga en esa progresión que hace que el poeta ignorado y repudiado durante largo tiempo, continúe siendo recordado y respetado por todos los que aman cada una de las palabras que supo legarnos.
Galería de fotos del acto