SAF – 27 de diciembre de 2015.
La falta de población juvenil en los pueblos de Castilla, dificulta cada vez más el mantenimiento de las tradiciones. Pozuelo no iba a ser menos y el día de Navidad, por la tarde,
sólo dos jóvenes –hasta hace poco eran cuatro-, se presentaron como Entrantes para bajar a San Esteban y colocarlo en sus andas como manda la tradición, Alejandro Menéndez Gago y Adrián García Sánchez, ambos residentes en Madrid.
Una vez más se cumplió la tradición y se cantaron las vigilias en Latín y a continuación la procesión pagana, con Tafarrón y Madama, se dirigió hacia la casa del alcalde, D. Jesús Tomás Pino, que agasajó a todos con la “convidada”, un ágape de ricas viandas y dulces de la zona regados con un extraordinario vino casero. Afortunadamente los hijos de los emigrantes extendidos por toda la geografía de España, mantienen viva la tradición que va pasando de abuelos a padres y los hijos, aunque lejos del pueblo mantienen el apego a esta tradición.
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