almeida – 26 de diciembre de 2015.
Esos ojos de abundancia
PUBLICIDAD
que no paran de manar
un agua muy cristalina
de un profundo manantial
Desde hace más de cien años
sale agua de los caños
para que beban en casa
y para que beba el ganado
Sus permanentes chorros
que van cayendo al unísono
desgastan hasta el granito
que va recogiendo el agua
Hasta en las noches sin luna
nos llama su gorgoteo
nos va guiando hacia ellos
en oscuridad absoluta
Publicidad
Dos sliders centrados